Hoy me levante izquierdo, con el pie.

tan buenito que parecia...
quien diría. pero bué, que
pena.

Así, de sopetón: postulo la teoría de que la fuerza y el envión que ha tomado el imperialismo yanqui en los ultimos 50 años en su plan de dominación mundial, se debe principalmente a tres personajes populares: el correcaminos, steven seagal, y macaulay culkin.

Por más que algunos estudiosos y analisistas marxistas sugieran que la causa hay que buscarla en los intereses expansionistas de algun presidente de turno, en la falta de escrúpulos de lideres sociales y religiosos, o en oscuras personas sin rostro que digitan los hilos del mundo desde algun bunker subterraneo, yo propongo a estos tres personajes como punta de lanza de una idea mucho mas macabra: Desde los 70' la industria del entretenimiento norteamericana viene deslizando una serie de personajes que guardan diacronicamente relacion entre ellos. Esta relacion se funda en el hecho de que NINGUNO de estos personajes cae NUNCA en las manos de sus rivales. ¿acaso vieron al correcaminos siquiera UNA vez en manos del coyote (que no sea en remeras truchas y mal pintadas de tipos que pretenden ser originales)?¿acaso existe alguna pelicula de seagal donde reciba tan solo UN puñetazo por parte de dealers cubanos o puertoriqueños? ¿acaso vieron a Kevin McCallister sufrir por algun tormento propinado por esos ladrones estupidos?.


no se de que te reís pancho.

Esta tan bien maquinado este plan de dominación que utilizaron el brazo en el que menos control habiamos puesto. Así, se filtraron en la cultura popular personajes que tenian como fin ultimo frustrar las aspiraciones de toda una generacion mundial de jovenes. Porque ¿cual es el mensaje que nos queda de tanto ver a coyotes, dealers, y ladrones estupidos fracasar? El mensaje es uno solo: no importa cuanto uno se esfuerce, hay cosas que estan destinadas a nunca suceder. Hacernos saber que por mas que nos esforzemos en un objetivo, hay cosas que nunca lograremos , cosas que escapan a nuestras capacidades, o lo que es igual: que las cosas estan PREDESTINADAS a suceder, lo que lleva el plan de dominacion hasta hoy politico/ economico de norteamérica a un plano existencial. La intencion es convertir generaciones de adolescentes en masas de adultos frustrados y sin más aspiraciones que pasar a formar parte del maldito sistema de cerdos capitalistas yanquis burgueses conformistas... y balas.
Lo sufrio la generacion del 70' con el Correcaminos y el pobre coyote. Es verdad que la mayoria de sus planes sí merecian el fracaso, pero algunos simplemente eran geniales. Utilizó a su favor la fisica cuantica y la última tecnologia. Estudió, se graduó en diversas carreras, se hizo shamán, logró hacer llover. Y nada. su constante derrota nos decia: "no importa cuanto estudien, cual sea la preparacion que obtengan. El sistema en el cual se basa la dominacion yanqui no es el de premios y castigos. La movilidad social es una utopia." El hecho de que aún el plan perfecto falle por una ley fisica caprichosa que hacía que toda una montaña se derrumbase antes que el montículo de tierra donde se posaba el correcaminos nos decia: "Dios no existe, y si existe no esta de tu lado, maldito zurdo".


fuerza, que este post interminable ya termina.

En los finales de los 80' la frustracion por un destino que se niega se personifico en las peliculas de Steven Seagal. Ya con Steven Seagal no puedo hacer un análisis tan exhaustivo porque en general sus peliculas me aburren. Pero he visto varias escenas como para opinar (o quizás no, no importa). De lo que estoy seguro es que no recuerdo haberlo visto sangrar. ni siquiera una vez vi que reciba una puñetazo, ya no digo que lo venzan ni que le amputen miembros. Simplemente despeinarlo, sacudirle esa gomina que coronaba su adusto e inmutable rostro.

Ya iniciada la decada del 90' la frustracion, y el concepto de la predestinacion llego a nosostros bajo la forma de Kevin McCallister. Lo peor de todo es que si Kevin personificaba un destino que se nos escabullia de las manos, a nosotros nos tocaba el triste papel de esos ladrones de poca monta y extremadamente estupidos, tratando de alcanzarlo. El capitalismo yanqui se nos reia en la cara mientras hordas de nosotros pagábamos la entrada para ver la sátira del genero humano, nuestra propia humillación (mi consuelo es que yo no fui a verla al cine, y cuando la alquile en video la devolvi sin rebobinar). Una ironía canibalesca.

Camaradas: yo ya desperté. Espero que pronto lo hagan ustedes para iniciar un cambio en el orden de las cosas. En un proximo post hablaré de una idea que tengo para comenzar esta revolución existencial, una revolucion que los obligará a tomar partido: o me dan plata o me mato.